Declaración sobre la guerra Ucrania-OTAN/Rusia
El Mopassol es un movimiento que nació después de la segunda guerra mundial. Nacimos para luchar contra el fascismo, por la preservación de la paz sin imperialismos, para construir lazos de solidaridad entre los pueblos como mandato evolutivo de nuestra especie. Los derechos colectivos de los pueblos del mundo nos inspiran en nuestro qué hacer. Desde que fue instalada la base militar de la OTAN en nuestras Islas Malvinas con el objetivo de garantizar la existencia del colonialismo en tierras Argentinas y con él la expoliación de nuestros recursos, no hemos cesado en la tarea de denunciar y de explicar al mundo sobre nuestra más sentida causa: La paz de nuestro Atlántico Sur que se ve amenazada con la existencia de esa base militar de la OTAN. Las amenazas de guerra para nuestro continente no solo provienen de la base de la OTAN en Malvinas. A esa base se le suma una red que atraviesa todo el continente, más de 70 bases militares de la OTAN y EEUU. Hoy en la provincia de Neuquen, Argentina, muy cerca del yacimiento de gas y petróleo de Vaca Muerta, se construye otra base de EEUU. Igualmente es amenaza para la paz del continente la incorporación de Colombia como miembro asociado a la OTAN, la incorporación de Brasil como allado extra OTAN durante el gobierno de Bolsonaro, y la permanencia de Argentina como aliado extra OTAN desde el gobierno de Menem. hasta nuestros dias.
La OTAN ha cercado nuestros recursos estratégicos a lo largo y ancho de nuestro continente, y sus efectos los hemos sufrido muy dolorosamente en los últimos años: Los golpes de Estado de todo tipo que se han llevado adelante en casi todos los países de nuestra América. El envio de armas a Bolivia por parte de Argentina para la represión del pueblo boliviano a fin de sostener el golpe de estado es producto de la existencia de la OTAN para señalar uno de tantos ejemplos que podemos dar al mundo. Sabemos qué es la OTAN, la padecemos. No hay paz donde hay OTAN. Los pueblos de nuestra América saben que su única herramienta de paz es la diplomacia de los pueblos, y con ese fin creamos UNASUR. Una de las grandes tareas de aquella organización fue pedir explicaciones al expresidente colombiano Alvaro Uribe Velez cuando firmo el acuerdo con EEUU para instalar 7 bases militares de EEUU en Territorio Colombiano, o cuando Colombia bombardeo Ecuador y UNASUR fue mediadora en aquel conflicto. Fue también gracias a UNASUR que Colombia llevo adelante los acuerdo de paz. Paz ha sido todo lo que hemos buscado construir y defender.
Pero cada gobierno alineado con EEUU que fue llegando, tuvo como primer tarea destruir UNASUR y lo lograron. Después de ello hicieron la guerra en nuestro continente, porque los golpes de estado perpetrados han sido la expresión de la guerra hibrida que sufrimos día a día.
En nuestra América sabemos de paz y sabemos muy bien quien no la quiere.
El sistema internacional creado después de la segunda guerra mundial no ha servido al mundo para construir la paz. La OTAN hace lo que quiere y nadie hace nada. Solo en el siglo actual la OTAN destruyo Irak, Afganistan, Siria y Libia. Quizás la incapacidad del actual sistema internacional sea ver impávidos el genocidio perpetrado por Israel contra el pueblo palestino sin que nada suceda, el bloqueo económico y financiero al pueblo de Cuba sin que nada suceda Las consecuencia de tanta obsolescencia es la guerra.
Pero cada vez que los pueblos quieren construir diplomacia entre los pueblos son destruidas todas y cada una de las iniciativas.
Hoy más que nunca decimos Paz con dolor de guerra, perseveramos en la necesidad de seguir luchando por el futuro posible en paz. Con convicción decimos No a la OTAN, con firmeza decimos que es el tiempo de los pueblos y su diplomacia.
Que la Paz sea, que los instrumentos de paz sean para los pueblos.
La OTAN ha cercado nuestros recursos estratégicos a lo largo y ancho de nuestro continente, y sus efectos los hemos sufrido muy dolorosamente en los últimos años: Los golpes de Estado de todo tipo que se han llevado adelante en casi todos los países de nuestra América. El envio de armas a Bolivia por parte de Argentina para la represión del pueblo boliviano a fin de sostener el golpe de estado es producto de la existencia de la OTAN para señalar uno de tantos ejemplos que podemos dar al mundo. Sabemos qué es la OTAN, la padecemos. No hay paz donde hay OTAN. Los pueblos de nuestra América saben que su única herramienta de paz es la diplomacia de los pueblos, y con ese fin creamos UNASUR. Una de las grandes tareas de aquella organización fue pedir explicaciones al expresidente colombiano Alvaro Uribe Velez cuando firmo el acuerdo con EEUU para instalar 7 bases militares de EEUU en Territorio Colombiano, o cuando Colombia bombardeo Ecuador y UNASUR fue mediadora en aquel conflicto. Fue también gracias a UNASUR que Colombia llevo adelante los acuerdo de paz. Paz ha sido todo lo que hemos buscado construir y defender.
Pero cada gobierno alineado con EEUU que fue llegando, tuvo como primer tarea destruir UNASUR y lo lograron. Después de ello hicieron la guerra en nuestro continente, porque los golpes de estado perpetrados han sido la expresión de la guerra hibrida que sufrimos día a día.
En nuestra América sabemos de paz y sabemos muy bien quien no la quiere.
El sistema internacional creado después de la segunda guerra mundial no ha servido al mundo para construir la paz. La OTAN hace lo que quiere y nadie hace nada. Solo en el siglo actual la OTAN destruyo Irak, Afganistan, Siria y Libia. Quizás la incapacidad del actual sistema internacional sea ver impávidos el genocidio perpetrado por Israel contra el pueblo palestino sin que nada suceda, el bloqueo económico y financiero al pueblo de Cuba sin que nada suceda Las consecuencia de tanta obsolescencia es la guerra.
Pero cada vez que los pueblos quieren construir diplomacia entre los pueblos son destruidas todas y cada una de las iniciativas.
Hoy más que nunca decimos Paz con dolor de guerra, perseveramos en la necesidad de seguir luchando por el futuro posible en paz. Con convicción decimos No a la OTAN, con firmeza decimos que es el tiempo de los pueblos y su diplomacia.
Que la Paz sea, que los instrumentos de paz sean para los pueblos.
Secretaria Ejecutiva Mopassol
Argentina
25 de febrero de 2022
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